miércoles, agosto 02, 2006

Si dices que te vas...

Si ahora te me vas, ¿qué haré sin ti? Eres mi luz, mi impulso de cada día y cada momento. Gracias a tí he logrado vencer a la debilidad, gracias a tí he adquirido el coraje que llevo dentro. Si no fuera por ti, no habría sido posible salir adelante.
FORTALEZA... mi gran aliada, no me abandones en medio de la nada, no me niegues un estandarte, no me quites el vuelo.
Si dices que te vas.... no sé como vivir, no quiero acostumbrarme a tu ausencia, no quiero caminar sin rumbo.
Si dices que te vas... no perderás tu lugar dentro de mi
Si dices que te vas... llévate mi debilidad contigo
Si dices que te vas... espero un dia vuelvas con la misma intensidad que me dejas
Si dices que te vas... no sé cómo sobreviviré... no puedo pedirte que me lleves contigo, solamente puedo desear y esperar que vuelvas pronto.

¿Extrañando lo inexistente?

Hay ocasiones en las que extrañamos situaciones que no hemos vivido y, sin embargo, las ansiamos.
¿Cómo es posible extrañar algo desconocido y anhelarlo como si fuera una parte de nosotros que se ha ido?
¿Será que nuestro insconsciente crea situaciones ideales y nos acostumbramos a aquellas ideas? ¿o que confundimos los recuerdos con lo que aspiramos?
Es curioso reflexionar sobre esto encontrándome sumergida en esta misma situación, buscando alguna explicación a aquello que me sucede y siento... sin poder responder alguna pregunta de las planteadas anteriormente... quedándome en el mismo lugar y con las mismas dudas, con la diferencia de que alguien más ya se lo habrá planteado también.